Las Esencias Florales expanden nuestra comprensión del cuidado de la salud, reconociendo la relación existente entre cuerpo y alma, y el tejido fino conformado por los aspectos físico, emocional, mental y espiritual, del bienestar. Se dirige al sutil pero muy importante reino de la psique humana, del cual emanan los pensamientos y los sentimientos y, del mismo modo en que el alimento sostiene el cuerpo humano, así mismo las flores nutren el alma humana, favoreciendo el bienestar psicológico y emocional .
Las Esencias Florales no son panaceas, sino catalizadores que estimulan la capacidad para dar respuesta, o para asumir la responsabilidad de los retos de la vida, pueden aumentar y facilitar la meditación y la oración, el desarrollo moral, la responsabilidad social, el ejercicio físico, y una buena dieta y una buena higiene, sin embargo, NO reemplazan en ningún caso el tratamiento médico.
Las Esencias Florales apuntan a estimular una mayor conciencia de pensamientos y sentimientos, que contribuyen a la salud y al bienestar, construyendo así un puente vital entre la conciencia del cuerpo y del alma.